En el programa de este martes hemos charlado con Germán Suárez Blanco sobre su reciente libro "Mitos, ritos y costumbres de La Cepeda (León). Un estudio antropológico", editado por Lobo Sapiens. En él quedan retratados, muchas veces en cepedanu (la variante comarcal del leonés), un montón de leyendas, personajes mitológicos, tradiciones, etc. Así van desfilando por la obra los trasgos, los relatos de ánimas, el calendario tradicional, las vírgenes, la Candelaria, San Blas y la garganta, el Reñubeiro, la bendición de las cosechas, blasfemias, los juramentos y maldiciones, las brujas y curanderos, las tareas más penosas, la desaparición del pueblo de Sencil, la hospitalidad cepedana, las subastas, las conroblas y almonedas, la cuelga, los feijes y manoyos, las galochas, la campana tañida, etc.
Germán incluso nos leyó un fragmento en cepedanu, ya que tuvo la suerte de contar con sus padres para aprenderlo y comprenderlo. Podéis escucharlo en el programa, en este enlace.
Aquí os dejo una pequeña biografía de Germán, en la que se puede apreciar que ha tenido una vida de lo más intensa e interesante:
Nacido en Villarmeriel, en 1942, en plena posguerra, época de máxima escasez económica, cuando la mayor parte de quienes habían emigrado del pueblo en busca de mejores condiciones laborales acababan de regresar para matar el hambre con el producto de dos palmos de tierra heredados de sus mayores.Admitido en la escuela del pueblo a temprana edad, allí sació sus primeras curiosidades intelectuales. El Bachillerato, en Astorga, en el Seminario, con beca ganada por oposición. Allí de unas cosas se aprendía muchísimo más que en los institutos y de otras muchísimo menos.Dos años de trabajo como periodista en Radio Popular de Astorga y otros dos de servicio militar entre las arenas del Sáhara.A la vuelta, oposiciones a Inspector de Policía. Destinado en Oviedo, allí se licenció en Filología Española obteniendo el doctorado bajo la dirección del profesor Alarcos Llorach.Las oposiciones a profesor de Enseñanza Media lo llevaron a Lérida y la obtención de la Cátedra deLengua lo devolvió a Asturias donde ejerció como catedrático de Lengua Española hasta su jubilación.