·La mecánica
Los que como yo tengáis ya cierta edad, seguramente os acordéis de las "maquinitas" que hicieron furor allá por los años 80. Su verdadero nombre era "Game&Watch"("Juego y Reloj"), ya que su función principal era la diversión, pero también tenían un reloj al que se le podía poner una alarma. Funcionaban con la misma tecnología de cuarzo que los relojes digitales.
Cada una de estas primitivas consolas traía un único juego, aunque con dos modalidades: Game A, o "normal", y Game B, en versión más acelerada y difícil, apta en principio sólo para los más expertos.
Recuerdo que el primer modelo que vi fue en 1º de EGB, allá por 1981, y era el juego en el que se maneja a un buzo rescata-tesoros que tiene que esquivar los tentáculos de un enorme pulpo.
·Cómo surgieron
Gunpei Yokoi, que había comenzado a trabajar en Nintendo en 1965, observó en un viaje en tren cómo un hombre de negocios se entretenía jugando con los botones de una calculadora LCD. Después se le ocurrió la idea de crear un reloj que también tuviera un juego en miniatura para matar el tiempo. Así nació la colección de juegos Game&Watch, que tuvo casi 60 títulos en su haber. Por cierto, Yokoi también fue el inventor de la Game Boy.
·Su impacto
En aquellos tiempos de crisis y recesión económica (¿a qué me suena ésto?) sólo los padres con más posibilidades podían regalar uno de estos trastos a sus hijos: por ejemplo, por mucho que insistimos mi hermano y yo, nosotros tardamos años en conseguir una (en una inolvidable visita a Ceuta, por cierto).
Los afortunados compañeros del colegio que contaban con una (o más) se convertían en los más populares, y recuerdo cómo los rodeábamos los demás en el patio o en el autobús sólo por verlos jugar, y si era amigo nuestro, para ver si nos dejaba "echar una partida". El objetivo de todos los niños (y no tan niños) en todas las versiones existentes era "darle la vuelta al marcador", es decir, pasar de 999 puntos, lo que era francamente difícil.
Enseguida empezaron a aparecer innovaciones, como las "maquinitas de dos pisos": las más famosas fueron las de Donkey Kong (de la que hubo al menos dos partes) y la de Mario Bros, en la que tenías que evitar que se cayeran cajas con unas botellas que yo inocentemente pensaba que eran de leche, pero que más tarde comprendí que eran de alcohol. Un tiempo después aparecieron las enormes "tabletop" o "Tiny Arcades", con la novedad de que eran en color, aunque la mecánica era la misma.
·Descargas de emuladores
Conozco desde hace un tiempo dos sitios de Internet en los que uno se puede descargar varios emuladores de maquinitas: se trata de "Madrigal's Handhels Simulators", y "Game&Watch mania", con descargas en principio para Windows, pero muchas de las cuales se pueden usar en Linux a través del Wine.
·Reflexiones finales
Después de haber jugado de nuevo a algunos de estos emuladores, comprendo que a las nuevas generaciones les puedan parecer monótonos y repetitivos, y sin ningún aliciente estético. Sin embargo, creo que las maquinitas aportaban algo de lo que no éramos muy conscientes en su momento: te forzaban a concentrarte, y a tener ciertos reflejos, por lo que creo que en cierto modo eran muy beneficiosas. No sé qué pensaréis vosotros.