Novedades en el Cuaderno de Notas
30 marzo, 2006
Mapas antiguos de España (XXVIII)
29 marzo, 2006
ASTURIA, PRIMER NOMBRE QUE RECIBE NUESTRA TIERRA
19 marzo, 2006
Los ástures eran un conjunto de tribus denominadas así por los romanos y que habitaban gran parte del territorio de las actuales provincias de Asturias, León, Zamora y partes de Orense y Portugal. Su nombre parece proceder de la raíz indoeuropea “-stour” que significa río.
A partir de la época de Augusto (27 a.C.- 14 d. C.), las regiones del Norte se van integrando en la estructura organizativa romana. En primer lugar, entre los años 16 y 13 a. C., la península se divide en tres provincias: Citerior ó Tarraconense, Bética y Lusitania. Dependiendo del gobernador de la Tarraconense había tres legados: uno de ellos al mando de dos legiones en Asturia-Gallaecia, otro controlando la región Cántabra hasta los Pirineos y otro, sin tropas, al mando del resto de la provincia. Con Vespasiano se crean nuevas demarcaciones administrativas: los Conventos Jurídicos aunque anteriormente existían un Prefecto de Gallaecia y otro de Asturia. A pesar de la creación de tres Conventos Jurídicos en el Noroeste: Ástur, Lucense y Bracarense, los tres están al mando de un único Legado Jurídico (Legati Iuridici per Astyriam et Gallaeciam). Para el resto de la Tarraconense la situación es distinta. Desde finales del siglo II, este Legado Jurídico, residente en Asturica Augusta ó Astorga, es además jefe de la Legio VII. Esta ciudad era la cabeza administrativa de todo el Noroeste.
Uno de los principales hitos de la integración del norte peninsular en Roma es la instalación de la Legio VII en lo que después será León, que se convertirá en el principal centro de control militar romano del Norte peninsular. No debe extrañar, por tanto, que esta ciudad se convierta en la capital del reino asturleonés cuando éste decide expandirse por su prestigio militar y la fortaleza de sus murallas.
En torno al siglo I d. C. se crea la Procuraduría de Asturia et Gallaecia en Asturica Augusta, cabeza administrativa del Noroeste.
La posible reorganización provincial de Caracalla (211-217) es controvertida. Algunos investigadores defienden la creación de la provincia Hispania Nova formada por Asturia y Gallaecia (algunos incluyen también al convento cluniense). Finalmente, con la reorganización del Imperio realizada por Diocleciano (284-305), se crean las provincias de Bética, Lusitania, Cartaginense, Tarraconense, Gallaecia, Baleárica y Mauritania Tingitana que sobrevivirán a las invasiones germanas del siglo V. La provincia de Gallaecia incluye a las entidades territoriales de Gallaecia y Asturia aunque en las crónicas coetáneas se incluyen también Cantabria. No está claro cual era la capital de esta provincia de Gallaecia. La supremacía episcopal en todo el Noroeste de Astorga y una lápida encontrada inclinarían la balanza hacia esta ciudad, aunque también hay indicios de que podría ser Bracara Augusta, la actual Braga, en Portugal.
En el año 409 se producirán las invasiones germanas, en el 455 se produce una gran batalla entre el rey visigodo Teodorico II y el rey suevo Requiario en la que este último es derrotado fijándose la frontera entre suevos y visigodos en el río Órbigo y en el 585 el rey visigodo Leovigildo derrota al suevo Audeca, poniendo fin al reino suevo del Noroeste e incorporando sus territorios al reino visigodo.
Los visigodos mantienen la división provincial de Hispania realizada por Diocleciano. El reino se divide entonces en las provincias: Lusitania, Bética, Gallaecia, Cartaginenese, Tarraconense y Narborense situándose al frente de cada un dux provinciae.
La capital de Gallaecia durante este periodo es Lucus, Lugo actualmente. Más adelante se añaden otras dos provincias más: Asturia con capital en Asturica, Astorga y Cantabria con capital en Amaya. Vasconia fue el único territorio peninsular fuera de la órbita toledana.
La primera referencia al Bierzo como territorio la encontramos en la Vida de San Fructuoso, escrito por su discípulo San Valerio a finales del siglo VII. San Fructuoso era probablemente hijo del dux de Asturia y se retira en el Bierzo donde su familia mantiene importantes posesiones y donde funda los monasterios de los Santos Justo y Pastor de Compludo, el Rufianense y el Visoniense.
El 27 de abril de 711 Tarik desembarca en Gibraltar. El rey visigodo Rodrigo se encuentra realizando una campaña militar contra los vascones. Después de la batalla de Guadalete entre el 19 y el 26 de julio de 711, el rey Rodrigo es derrotado y se produce el fin del reino de Toledo. Los musulmanes atacan prioritariamente los centros de poder visigodos, es decir, las capitales de los ducados y dominan así todos los territorios controlados por el reino visigodo.
¿Nuevo león para nueva bandera del Reino?
14 marzo, 2006
Respecto a la corona, observé con detenimiento las que aparecen representadas en el Libro de las Estampas de la Catedral de León (del que dispongo de una reproducción facsimilar), y concluí que en realidad siempre se repite el mismo modelo con ligeras variantes, así que finalmente dibujé la que aparece en la cabeza del león que os presento. También la corona de Alfonso IX parece ser una versión simplificada de ésta. Me gustaría señalar, que más que flores de lis, los florones parecen representar hojas de un árbol (probablemente roble), aunque este es un tema más propio para los estudioso de la Historia del Arte.
El color es el púrpura directamente sacado de una tabla de colores (código HTML #800080), si bien lo he atenuado un poco.
He optado por la disposición rampante, ya que, a pesar de que fue adoptada poco antes de la unión con la Corona de Castilla en 1230, opino que hay que respetar la trayectoria histórica del símbolo. Por el mismo motivo le he incorporado la corona, creada en tiempos de Sancho IV a finales del siglo XIII, y de origen por lo tanto no leonés: sin embargo, tuvo tal éxito la ocurrencia (que fue una respuesta propagandística a los problemas internos que tuvo que afrontar ese rey), que desde entonces, cuando se trata de representar al Reino, prácticamente forma parte del animal.
Me interesa MUCHO conocer vuestra opinión, ya que ha habido gente que le ha encantado, y otra a la que no le ha gustado nada (les parece muy estático, con trazos demasiado rectos y estirados). Os ruego que seáis sinceros: toda crítica será bienvenida. Tampoco me/nos cuesta nada hacer otro totalmente nuevo...
PD: Tras esta versión de prueba no dudéis que pronto pondré una imagen sin "censura" y en mejor calidad para que pueda descargársela todo el que quiera.
Mapa de los pueblos prerromanos del Noroeste
22 febrero, 2006
Los límites dibujados son más que dudosos, ya que los desconocemos en su mayor parte. La silueta blanca corresponde a la del Reino de León (o Región Leonesa, o País Leonés; hay nombres para todos los gustos). Las flechas rojas representan los ataques que eran más frecuentes de un pueblo prerromano a otro.
PD: También os agradecería que me votarais en el Toprank de León. Podéis hacerlo pinchando en el recuadro final de la columna derecha de la página (debajo de las noticias y los enlaces a mi Flickr y al Anillo Leonés) No hay premios ni nada, pero siempre ayudará a la divulgación de mi Cuaderno de Notas. Se puede votar una vez cada 24 horas. Gracias.
Mapas antiguos de España (XXVII)
17 febrero, 2006
Este mapa abandona la costumbre de utilizar colores para definir los límites y territorios de los distintos reinos hispanos, por lo que su apariencia recuerda a los de los siglos anteriores. Territorialmente, no aporta nada nuevo respecto a los anteriores: eso sí, sigue extendiendo artificialmente el límite entre Galicia y el Reino de León hasta las cercanías de Ponferrada.
EL PP HA DECIDIDO ASESINAR A LÉON
11 febrero, 2006
"Juan Vicente Herrera exige fondos para todas las provincias
El presidente regional del PP, Juan Vicente Herrera, fue el encargado de dar el paso a Rajoy en el acto público. / M. MARCOS / SECUNDINO PEREZ
LEON.— El presidente de la Junta y del PP de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, no está dispuesto a consentir que los fondos de cohesión se repartan sólo entre las provincias de León, Zamora, Salamanca y Avila. Herrera advirtió ayer que no consentirá ese reparto porque exige que esos fondos sean para todas las provincias de la Comunidad.
Ese fue el mensaje más claro que lanzó el presidente regional del PP en su intervención en el acto público convocado por el partido en el Auditorio de León.
Herrera considera que el reparto propuesto por el Gobierno, que sólo incluye a cuatro provincias, no es justo porque busca la confrontación territorial y él, como presidente de la Junta, no puede consentirlo porque estima que todas las provincias deben recibir fondos de cohesión para acabar con los desequilibrios territoriales.
¿Qué significa todo esto? Que al señor Herrera le parece muy mal que el PSOE siga adelante con el Plan Oeste, un Plan que consiste en asignar partidas presupuestarias extraordinarias a las tres provincias leonesas, que, curiosamente, son las más depauperadas y atrasadas de esta condenada autonomía. EL Sr. Herrera pretende que lo mejor es distribuir esas ayudas con las provincias castellanas, que, salvo el caso de Ávila, superan o se aproximan mucho al margen de convergencia con Europa. El Sr. Herrera, y el PP, lo que quieren es que León desaparezca, y por eso están tardando tantos decenios en hacer la autovía de la Plata, por eso desvían los fondos MINER para hacer obras en Valladolid, por eso bloquean el Circuito de la Bañeza, por eso bloquean el proyecto de la Estación de Esquí de San Glorio, por eso impulsan el aeropuerto de Valladolid e ignoran el de León (salvo para pagar un ernorme cartel con la leyenda "BIENVENIDOS A CASTILLA Y LEÓN" y con el escudo), y por eso boicotean cualquier iniciativa del Gobierno que tienda a ayudar a la región leonesa. ¿Y qué hace el PSOE ante estas afrentas? Nada. Y la verdad es que también empieza a oler a chusco asuntos paralizados como el Inteco (¿para cuándo?), la anulación de los peajes de las autopistas leonesas, etc., etc. Hay que ser fato para no darse cuenta de que las ayudas del Plan Oeste nunca llegarán a la región leonesa a no ser que ésta cuente CON UN MARCO ADMINISTRATIVO PROPIO.
Pero la culpa de todo, no nos engañemos, LA TENEMOS LOS PROPIOS LEONESES. Por ejemplo: no logro entender cómo el público no abucheó a Herrera cuando dijo lo de los fondos del Plan Oeste, o por qué Amilivia o cualquier leonés del PP del estrado no le tapó la boca con el sentimiento de vergüenza ajena. Ya empiezo a desesperar de esta tierra, y creo que no despertará jamás. ¿El león duerme, o es que está muerto?
BELLIDO DOLFOS, HÉROE DE ZAMORA (III)
01 febrero, 2006
“Semurenses etenim ea tempestate inmobiles permansere; qui profecto Semurenses, Adefonsi regis presidio muniti, repulsam domini sui non ferentes, misso magne audacie milite, dum circumsederet eos, Sancium regem dolo interfecerunt. Qui nimirum ab eo lancea inopinate ex adverso perfosus, vitam pariter cum sanguine fudit. Idem uero qui eum tam audaciter percussit, sicuti consilium fuerat, cursu rapidissimi equi, apertis portis, ab opidanis incolumis receptus est. Sed interempto rege, tunc cerneres ex tanta audacia, tantaque letitia, dispersio quanta, quantaque tristitia in illo tanto tanque nobili exercitu fuerit”. (Edición de Pérez de Urbel y González Ruiz-Zorrilla, Madrid, 1959)
La traducción me la ha realizado muy amablemente D. Maurilio Pérez, catedrático de Latín que ha sido sometido recientemente a una operación, y a quien deseo una pronta recuperación. Margarita Torres también ha colaborado con una versión previa, y yo mismo he puesto mis granitos de arena (si hay algún error, la responsabilidad es exclusivamente mía):
"Entre tanto, los zamoranos permanecieron inmóviles en medio de aquella tempestad. Sin duda estos zamoranos, cuyas defensas habían sido fortificadas con el auxilio del rey Alfonso, al no soportar la derrota de su señor, mataron mediante la astucia al rey Sancho mientras les asediaba gracias al envío de un caballero de gran audacia. En efecto, el rey, inesperadamente atravesado por la espalda con una lanza por él, perdió la vida junto con su sangre. El mismo que lo abatió tan audazmente, según se había planeado, montado en un rapidísimo caballo fue recibido incólume por los ciudadanos, una vez abiertas las puertas de la ciudad. Y, muerto el rey, hubieras podido ver cuánta dispersión y cuánta tristeza hubo en vez de tanta audacia y tanta alegría en aquel ejército tan grande y tan excelente"
Este texto es muy interesante por varias razones: en primer lugar, dice que Alfonso había reforzado las murallas de Zamora, lo que indica que, como Rey de León, era su señor superior, incluso por encima de Urraca, a quien le correspondía el señorío de la ciudad (aunque, por cierto, la Crónica Silense no la cita como presente en el cerco). En segundo lugar, que los zamoranos permanecieron fieles a Alfonso (otra posible traducción para "inmobiles" es, precisamente, "fieles"), y que por ello se enfrentaron al usurpador Sancho. Tercero: contra lo que afirma Pérez de Urbel, el cronista simpatiza con Bellido y con los zamoranos: al primero lo califica de "audaz" en dos ocasiones, y está clara la intención irónica cuando el cronista cambia a la segunda persona en la parte final: ese "hubieras podido ver..." parece reflejar una mueca de total ironía por parte del autor ante la desbandada de los asediadores.Como ya dije en otro momento, el plan urdido por los zamoranos y ejecutado por Bellido tiene toda la apariencia de las acciones de los comandos del siglo XX: actúa dentro de las líneas enemigas, da un golpe maestro, y regresa sano y salvo a la base.
Por cierto: según me ha informado Margarita Torres, se puede rastrear documentalmente la existencia real de Bellido Dolfos y de su hijo: al parecer fueron señores de amplios territorios en la zona norte de Zamora, con lo que el título de "héroe zamorano" se le puede aplicar sin ningún reparo. Ambos vivieron tranquilamente durante el reinado de Alfonso VI, y Bellido no fue mandado descuartizar como afirman los antihistóricos cantares de gesta.
La razón por la que los zamoranos no podían soportar la derrota de su señor Alfonso la veremos otro día, ya que las crónicas reflejan que ni Sancho ni el Cid fueron precisamente unos santos, y que , si alguien merece el apelativo de traidores, son precisamente estos dos personajes.
Si alguna lección podemos sacar de estos episodios, es que no se puede hacer Historia partiendo de cantares de gesta que fueron acuñados en Castilla y por castellanos más de un siglo después de los hechos.
UN FRAGMENTO DE LA CRÓNICA DE ALFONSO EL EMPERADOR
29 enero, 2006
Traducción:
"La florida caballería de la ciudad de León, portando los estandartes, irrumpe como un león/ Ésta ocupa la cima de todo el reino hispano (...) Como el león supera a los demás animales en reputación,/ así ésta supera ampliamente a todas las ciudades en honor.(...). Sus distintivos, que protegen contra todos los males, están en los estandartes y en las armas del emperador; se cubren de oro cuantas veces se llevan al combate”(2).