La mayoría de la gente parece creer que en la Edad Media se empleaba la letra gótica en exclusiva o, en todo caso otra no muy diferente a la nuestra. Sin embargo, como veremos, ésta es una visión muy alejada de la realidad. Por ejemplo, durante el periodo de existencia del Reino de León como estado medieval independiente (910-1230) se sucedieron y, en ocasiones se superpusieron tres tipos de letra diferentes: la visigótica, la carolina y la gótica. Este proceso fue común a toda la Hispania cristiana, aunque las grafías y cronologías de cada una de ellas variaron según el reino y el lugar geográfico. Así, por ejemplo, aunque la letra visigótica comienza a desaparecer a principios del siglo XII, en partes de León, Asturias y Galicia se siguen encontrando documentos en esta letra hasta el siglo XIII.
La disciplina que estudia las escrituras antiguas es la Paleografía (del griego “palaios”, antiguo, y “grafé”, escritura), y se suele incluir en los currículos de las carreras de Historia, Biblioteconomía y Documentación, e Historia del Arte. Para el lego en esta materia, existen muchas y aparentemente insalvables dificultades a la hora de tratar de leer un documento medieval. En primer lugar, está la dificultad de encontrarse ante una forma de escribir totalmente extraña según nuestros parámetros actuales. En segundo lugar, la lengua utilizada en estos documentos hasta bien entrado el siglo XIII fue única y exclusivamente el latín (por más macarrónico que fuese en ocasiones). Y en tercer lugar, porque los textos contienen tal multitud de abreviaturas, nexos entre letras, etc. que abruman enormemente a los paleógrafos noveles.
En esta serie de artículos me centraré en los tipos de escritura que se emplearon en León, especialmente en la época en la que contó con rey propio, aunque trataré brevemente las etapas anteriores y posteriores. Si el tema os parece interesante, os recomiendo encarecidamente los dos tomos de “Paleografía y Diplomática” de la UNED, dirigidos por el fallecido Tomás Marín. Para tener una perspectiva europea puede valer el libro de Marc Drogin titulado “Medieval Calligraphy: It´s history and technique” (Dover Publications), aunque cuenta con la desventaja de estar en inglés.
Que pena me dais yo que soy medio leones medio castellano y ahora venis vosotros ha decirme que o soy leones o castellano que no puedo ser CASTELLANO LEONES pero de que guindo os habeis caido todos pero todos somos y tenemos que ser ESPAÑOLES para tirar del carro de nuestra tierra y para no dejarnos comer el pam No somos regionalistas somos ESPAÑOLES Vacceos
ResponderEliminarPobre hombre, ¿no?
ResponderEliminarNo se ha enterado de nada...
He encontrado esta preciosa fuente por casualidad y la he instalado y enviado a muchos amigos. Gracias por su trabajo
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